Este fin de semana me aventé a pasar la frontera con mi carro eléctrico. Mi mayor miedo era la fila al puente y ver mi batería vaciarse sin avanzar 2 cm. El segundo miedo era de quedarme sin luz del lado equivocado de la frontera. El Paso como Juárez esta muy extensa y claro que las tiendas que me interesan están del otro lado de la ciudad…
Para el primer punto, no pude probar nada: no había nadie en el puente! Me sorprendió (era sábado por la mañana), pero de esto no me voy a quejar! Entonces todavía no se como se comporta la batería cuando el carro esta parado. En teoría no gasta nada: es una ventaja del motor eléctrico de solo gastar energía cuando avanza. Pero para sobrevivir 2 horas con 35 grados en el mero sol, se necesita el aire acondicionado y esto sí gasta energía… Está prueba será para otro día.
Lo que sí pude comprobar es el segundo punto (para las memorias de pájaros: se trata de saber si se puede cruzar la ciudad y regresar sin tener que empujar el carro). Y la respuesta es que no hay problema. Probablemente se pondría diferente el asunto después de 2 horas de fila al puente… Pero la ventaja de El Paso es que hay muchos lugares donde recargar su carro, y algunos estan gratis. Escoge un punto de carga no muy lejos del centro comercial donde quería ir. Estaba en el estacionamiento de una tienda que no conocía pero el nombre se escuchaba bien. Decidí entonces visitar la tienda mientras se cargaba el carro. Y no fue decepcionado! Descubrí una tienda con productos biológicos, locales o de importación, y todos de calidad. Pude así comprar entre otros Camembert de Normandia, Vino rosado AOP Côte de Provence y cookies “caseros”. Gracias mi carro eléctrico! Y mientras recorría toda la tienda, mi carro se recargaba solo y gratis! Ojalá y importen este concepto pronto a Juárez! 🙂
OK, en este punto, los que no pierden la meta de vista (o que se aburren), van a pensar: y que tiene que ver todo esto con el título? Ya voy…
Si temía tener dificultades a la frontera de ida, no esperaba nada de regreso. Este día me equivoqué dos veces… Mi compra principal este día fue un congelador. La Leaf no esta muy pequeña pero tan poco esta muy grande. El paquete cabía exactamente en la cajuela y estaba bien visible. Estaba feliz porque me tocó verde. Pero un agente me vió con mi cartón y me paró. No es justo, si me tocó verde…! 🙄
– Señor, que lleva atrás en su cajuela?
– Un congelador.
– Y cuanto le costó?
– 170 USD
– Puedo ver la factura?
– Claro.
– Es que el límite de importación por día es de 150 USD…
Hice mi “Francés inocente que no sabía” (lo que era cierto) y me dejó pasar.
– Pero va a pasar por el escáner…
Primera vez que me toca el escáner. Para los que no conocen, imaginense el escáner para maletas en los aeropuertos, pero tamaño XXL para 5 o 6 carros!… Entonces escaneamos el carro y esperamos los resultados. Y esperamos los resultados… Y… Estaba a un lado del oficial y veía que se ponía más y más nervioso. Pasaba mucho tiempo buscando a su jefe en el walkie-talkie. Los otros carros fueron liberados, pero yo no. Después de 15 minutos, le pregunto al oficial si hay algún problema.
– Señor, que transporta en su carro?
– Un congelador.
– Vamos a tener que abrirlo para verificar.
Esto era la última cosa que quería hacer. Estaba bien empaquetado y pesado. Le pido ver el escaneo y le muestro que el congelador aparece vacío.
– Si es cierto pero… Que es lo que transporte abajo de su carro?
Es cuando empecé a entender su problema: toda la parte de abajo del carro salía en alerta roja.
– Es la batería: es un carro eléctrico
– Me la puede enseñar?
– Pues… no! Esta a dentro del carro…
Después de quitar los tapetes para comprobar que no había ningún hoyo abajo, decide pasar el carro otra vez por el escáner. Y después de más conversaciones en el walkie-talkie, me deja ir. En total me detuvieron 45 minutos! Pero bueno, es el precio a pagar cuando uno quiere “escribir Historia” 😎
pobrecito jajajaj que aventuras… pero es algo nuevo en la sociedad veras que en algunos años será muy normal.
abrazos!!
Quien llora??? hahhaa pagaste bien tu historia, muy buena por ciertoo
A ver si no me quitan la visa la próxima vez…
Yo nunca lloro, es Claudia la llorona… 😀